¿Nos encontramos por el universo o por el algoritmo?
Cada vez que la conexión se basa del encanto superficial combinado con la química instantánea, el romance termina por volverse fugaz. Demasiado corto. Como los mini hornos del motel, que suben de temperatura en un pestañeo, y duran menos que una cita de Tinder. Empezar una relación centrado en el físico, es igual que confiar en un electrodom�